Martí pide aprender de la pandemia, pone en valor la sanidad pública, ensalza el papel de Europa y apuesta por la sostenibilidad

El presidente de la Diputación de Castellón, José Martí, ha lanzado un mensaje de optimismo para cerrar un año 2020 «que sin duda nadie olvidará», pero que ha servido para «que todos y todas debamos hacer de la necesidad virtud y defender un país y una provincia más justos, verdes, cohesionados e inclusivos», además de reforzar «el valor de lo público, con una sanidad más fuerte y unas administraciones que deben propiciar la solución a la crisis sanitaria, económica y social».

José Martí, en el balance del año, no oculta la «tristeza que supone para todos el daño que ha generado la pandemia de la Covid-19, que ha afectado a todo el planeta y que ha generado tanto dolor a tantas familias por la pérdida de vidas humanas». Asimismo, ha querido realizar una mención especial «a tantos colectivos, en especial los del mundo sanitario y de servicios sociales, que se han implicado de manera extraordinaria para atender las necesidades de la población». En este sentido, ha querido volver a lanzar un mensaje de «prudencia y respeto a las medidas que se están tomando para frenar la curva de la incidencia del virus porque, aunque es fundamental que haya comenzado ya la campaña de vacunación, es necesario no bajar la guardia».

El presidente de la Diputación reconoce las dificultades de uno 2020 que empezó ya con los estragos del temporal Glòria en el litoral e interior de la provincia de Castellón y que se vio sacudido de forma intensa a partir de marzo con la declaración oficial de la pandemia mundial por la Covid-19, que ha influido en todas las políticas desarrolladas durante todo el año.

Pese a todo, considera que la Diputación Provincial de Castellón, como administración local, «ha sido capaz de dar una respuesta, pues fuimos pioneros en marzo a la hora de adquirir y repartir mascarillas y material de protección sanitaria para nuestros municipios», de la misma manera que «trabajamos desde el minuto cero con todos los sectores sociales y económicos de la provincia, a través de diversas mesas de diálogo, para adaptar nuestro presupuestos y priorizar las actuaciones a través de un Plan Reactiva» de más de 9 millones de euros.

Para José Martí, «aunque probablemente haya cosas que se pueden mejorar, nadie puede poner en duda que la Diputación, dentro de sus competencias, ha estado ahí, al lado de los ayuntamientos y de los ciudadanos, porque esa era nuestra prioridad».

El año acaba además con un presupuesto para 2021 expansivo, con cerca de 20 millones de euros más respecto al de 2020, «unas cuentas económicas que han crecido un 13 por ciento gracias a que el Gobierno, en octubre, dejó en suspenso las reglas fiscales». Los 168,3 millones de euros previstos para el próximo ejercicio «serán la herramienta para atender la crisis económica y social», algo que, tal y como resalta, han avalado PSV, Compromís y Ciudadanos. Sobre el voto contrario del PP, ha vuelto a lamentar su postura «porque, pese al diálogo constante que hemos mantenido con ellos y a haber incorporado en las cuentas muchas de sus propuestas, han optado por mirar a Madrid y sus siglas y no a las necesidades de Castellón».

Con este presupuesto, según José Martí, el gran objetivo ahora es «reconstruir Castellón y conseguir que esta crisis que estamos viviendo sea el acelerador de nuevas políticas y de un nuevo modelo de sociedad, donde la digitalización, la sostenibilidad y el bienestar sean la clave para poner en valor, sobre todo, la vida en los pueblos de interior».

Para eso, reconoce el presidente de la Diputación, «es necesaria una discriminación positiva del interior, y es ahora sin duda la oportunidad de trabajar en ello de la mano sobre todo de Europa, que está más joven y viva que nunca». Y es que la pandemia, a su juicio, «nos ha revelado que sin Europa no habrá recuperación», poniendo así en valor los fondos de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno.