Barriga, el proyecto gastronómico de Paco Llansola encara el final del año reafirmando su esencia: cocina local, producto de temporada, cultura y celebración. Tras meses de consolidación y una acogida que ha superado todas las expectativas, el restaurante llega a diciembre con novedades culinarias, una nueva exposición artística y propuestas especiales para vivir las fiestas navideñas en su espacio en pleno corazón de Castellón.
Lo que nació como un juego de palabras —Bar Riga— pronto se convirtió en una declaración de intenciones. Su filosofía es clara: comer bien, compartir y disfrutar. El producto marca el ritmo de la cocina, siempre bajo los principios de calidad, frescura y proximidad. “Elegimos directamente de la lonja o el mercado, trabajando con proveedores que comparten nuestra filosofía y respeto por el producto”, explica Paco Llansola, fundador y director del proyecto.
Con todo, diciembre trae a Barriga una carta en plena transición, donde conviven sabores otoñales con los primeros indicios del invierno. Uno de los platos estrella de esta temporada son los robellones y trompetas de la muerte con alcachofa de Benicarló confitada en mantequilla, romero y ajo, acompañados de allioli de ajo negro y yema curada en soja. Una elaboración de unidades limitadas concebida como un homenaje al Maestrat tras las lluvias y enraizada en los paisajes de interior.
A esta propuesta se suman dos clásicos que permanecen en carta pero evolucionan según mercado. Por un lado, los macarrones de Paco, actualmente en su versión “Macabrones”, con carbonara y sobrasada de Mallorca. Por otro, El escabeche Barriga, que en estas semanas se elabora con pez limón. También sigue disponible la propuesta que conquistó la última edición de la Ruta de la Tapa: el Ximo de Sepia Encebollada, un guiño al recetario castellonense con sepia del Grao y allioli casero de gilda.
Con el invierno a la vuelta de la esquina, Barriga estrenará una nueva carta que recupera la memoria gastronómica desde una mirada actual. Entre las propuestas destacarán el conejo con caracoles y sobrasada, las mollejas con tupinambo y reducción de carabineros, así como cavalos y caldos especiales para Navidad, concebidos como evocaciones de sabores de la infancia. El broche dulce lo pone la torrija de Barriga, elaborada con pan duro macerado en cremaet y leche, un postre sencillo y con un claro guiño a Castellón.
Todo ello se acompaña de una bodega en constante evolución, con referencias de pequeños productores y vinos mediterráneos seleccionados para realzar cada plato. Entre ellos destacan Sincronía Tinto (Mallorca), Jaspi Negre (Montsant), Clotàs M – Edición especial Vicent Flors Martí (Castellón), A Mi Aire (Lucena del Cid) o Tiro al Blanco Tinto (Ribeiro).
Navidad en Barriga: vermut especial y tardeo de Fin de Año
Fiel a su espíritu de celebración y a la organización periódica de eventos culinarios y culturales que han llevado a cabo desde que abrieron, Barriga ha preparado dos citas especiales para Navidad. Y es que para el 24 de diciembre han preparado un Vermut Navideño con música en directo a cargo de Carlos Bru. La cita dará comienzo a las 11:40 horas, con bebida y aperitivo.
Para Nochevieja, el local propone el Tardeo Barriga, una despedida anticipada del año para quienes quieran vivir un fin de año familiar, con las reconocidas playlists del local como hilo conductor.
Además, el restaurante ha diseñado tres menús especiales navideños, disponibles durante todo diciembre y parte de enero, para grupos de cuatro o más personas. Con precios entre 35 y 60 euros, incluyen imprescindibles de la casa como buñuelos de bacalao, huevos con chistorra, steak tartar o gamba roja Paraíso, además de platos de temporada y postres artesanos.
Arte local para cerrar el año: la exposición “BARRIGAS”
La vocación cultural de Barriga también se hace notar en diciembre con la inauguración de “BARRIGAS”, una nueva exposición realizada por un artista local que ha preferido permanecer en el anonimato. Las obras, creadas mediante grabado en relieve prensado y elaboradas con materiales reciclados, exploran formas orgánicas y coloristas inspiradas en la gastronomía.
Durante todo el mes, la clientela podrá participar en un sorteo especial para llevarse a casa algunas de las piezas. Por cada 30 euros de consumo, recibirán una papeleta que depositarán en una urna situada en la entrada del local. Los nombres ganadores se anunciarán el Día de Reyes.
Entre platos que abrazan la temporada, arte que nace de lo cotidiano, una bodega con alma y eventos que reúnen a generaciones, Barriga despide 2025 más vivo que nunca. El proyecto entra en 2026 reafirmando su compromiso de poner a Castellón en el mapa a través de una propuesta donde la gastronomía, la cultura y la celebración conviven en equilibrio.