El concejal de Movilidad Sostenible de Castelló, Jorge Ribes, ha visitado esta semana junto a técnicos municipales, varios espacios de Barcelona donde se han desarrollado proyectos de referencia y nuevas formas de construir en espacios urbanos con impacto social, económico y medioambiental. Se trata de una iniciativa enmarcada dentro del programa de formación y capacitación, financiado a través de los fondos europeos Next Generation del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, dentro del proceso de elaboración de la Agenda Urbana de Castelló."Es una experiencia muy enriquecedora conocer de primera mano proyectos como el Barrio 22@ de Barcelona, que ha permitido transformar un barrio industrial como el de Poblenou en una gran supermanzana, con espacios modernos, a través de la regeneración urbana, la movilidad sostenible y soluciones basadas en la naturaleza", ha explicado Ribes. "Otras intervenciones como la remodelación del paseo Sant Joan o los jardines de la Rambla de Sants nos han servido de inspiración para las políticas de movilidad y sostenibilidad que impulsamos desde Castelló", ha apuntado el concejal.Así, durante la visita, la delegación municipal ha recorrido el Barrio 22@, un proyecto de regeneración urbana que ha convertido el distrito en una área de innovación referente a nivel internacional, con la supermanzana de Poblenou como atractivo principal, que permite complementar acciones impulsadas en Castelló como la supermanzana de Maestría. Además, han estado en el eje verde Cristóbal de Moura, un proyecto pionero y un modelo para la implementación de la estrategia calle verde de Barcelona, que incorpora la gestión de agua pluvial de una manera sostenible y pasiva a través de Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible (SUDS), similar a la prevista en la remodelación de la avenida Lledó que se está llevando a cabo.Otros de los puntos de interés son el paseo de Sant Joan, cuya remodelación prioriza el uso peatonal y convierte la vía en un corredor verde urbano hasta Ciutadella; y el barrio Bon Pastor, donde destaca la naturalización del paisaje urbano con jardines de lluvia y áreas de biorretención entre otras técnicas de drenaje urbano sostenible. A destacar también la visita a los jardines de la Rambla de Sants, que se sitúan en una plataforma elevada situada sobre las vías de tren y metro, y considerados la primera rambla aérea de Barcelona. Ubicados a una altura de entre 6 y 14 metros sobre el nivel de la calle, han sido diseñados con criterios de sostenibilidad, con iluminación de leds, energía fotovoltaica y riego por aguas freáticas.