La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado la "sobrecarga" que, debido a la falta de personal, sufren áreas especializadas en la atención de la salud mental en Castellón como la Unidad de Trastornos de la Conducta Alimentaria."Tan solo durante los últimos tres años, los casos atendidos en el centro especializado ubicado en la calle Useres de Castellón han crecido en un 177%, al pasar de 73 en 2018 a 202 nuevos pacientes en el año 2021 y, solo en lo que va de año, entre los meses de enero y junio, se han recibido 125 nuevos casos, lo que supone el doble de los registrados el año pasado por estas mismas fechas", han alertado desde CSIF, que han criticado que "mientras los casos aumentan, la falta de profesionales sigue lastrando la calidad de la atención sanitaria y agravando las listas de espera".En concreto, desde la central sindical han alertado de carencias como "la no sustitución del personal de baja, a lo que se suma la falta de un psiquiatra a media jornada para cubrir el hospital de día, el centro de especialidades y el colegio de salud mental, así como de un especialista para poder hacer seguimiento de los casos".Esta falta de medios humanos se repite también en centros como el de Cardenal Costa, donde solo hay dos psiquiatras para atender a una lista potencial de usuarios de 70.000 SIP; la unidad de Media Estancia del Hospital Provincial de Castellón, donde al menos faltan 4 auxiliares que no se sustituyen y 1 terapeuta ocupacional; o el área de infanto-juvenil del Provincial, que carece de un profesional de Psicología.Desde la central sindical han lamentado además que "la falta de contratación ha obligado a eliminar en los últimos dos años media docena de programas de salud mental, como el de trastorno bipolar, el de primeros episodios, el de atención domiciliaria, el de tratamiento para niños con especial problemática, el de atención a los centros carcelarios o el de apoyo a los familiares".Una escasez de profesionales que, según CSIF, "también está provocando que la espera media para atender en primera visita a un caso preferente, como por ejemplo a una persona que tenido un intento de suicidio, supere los 40 días, lo cual resulta absolutamente desproporcionado"."Pedimos a Sanitat que resuelva cuanto antes estas carencias, cubra las bajas y revise las contrataciones para cubrir de manera adecuada las necesidades actuales en materia de salud mental en Castellón", han incidido desde CSIF.