Hace un año, a pocos días de llenar las calles de música, color y de ambiente festivo, la cancelación fue un jarro de agua fría para el món de la festa y la resignación dio paso a la esperanza de que este 2021 pudiesen celebrarse las fiestas de la Magdalena en Castelló de forma más grande. Pero no ha sido así. La pandemia del coronavirus continúa más presente que entonces y este marzo tampoco habrá gaiatas, cabalgata del Pregó, Romería de les Canyes ni ambiente en las collas, aunque la puerta está abierta a que se celebren a partir del segundo semestre.Si la COVID-19 no se hubiese convertido en pandemia, hoy sería la víspera de una Magdalena muy esperada. Se celebraría definitivamente el 75 aniversario – ahora el 76 – del 6 al 14 de marzo y todo el món de la festa llenaría las calles, pero no habrá ningún tipo de acto que de alguna forma genere aglomeraciones o pueda provocar riesgos de contagios, según ha reiterado el Ayuntamiento de Castelló.De hecho, este jueves confirmó que ni el Patronato de Fiestas ni el ayuntamiento han recibido solicitud para instalar la gaiata de la ciutat en ningún espacio público. “Además, cabe recordar que las fiestas están suspendidas y se ha de evitar cualquier tipo de acto o actividad que pueda generar aglomeraciones de personas o cualquier otra situación que suponga un riesgo sanitario, en línea con las medidas preventivas y recomendaciones sanitarias”, señalan fuentes del consistorio. Según ha informado el concejal de Seguridad Pública y Emergencias, David Donate, la Policía Local, en coordinación con la Policía Autonómica, realizará un control exhaustivo de las collas para velar por el cumplimiento de las actuales restricciones y garantizar que no se produzcan aglomeraciones. También en colaboración con la unidad adscrita de la Policía Autonómica se llevará a cabo un dispositivo de control del cumplimiento de las medidas en las terrazas y establecimientos. Para ello, se reforzará la presencia policial en puntos como el centro de la ciudad.Además, el domingo habrá un despliegue especial para evitar la asistencia al paraje de la ermita de la Magdalena y evitar así una posible romería alternativa, por lo que no se podrá aparcar en la explanada del paraje, se harán controles en caminos, se ofrecerán puntos informativos y tanto la ermita como el Castell Vell y el Centro de Interpretación permanecerán cerrados. Y es que pese a que las distintas autoridades han tratado de concienciar sobre la importancia de ser responsables y evitar al máximo cualquier atisbo de fiesta, finalmente el alumnado de los centros educativos no tendrá clase la semana que viene. En un principio el Consejo Escolar Municipal votó a favor de mantener el calendario escolar y de dejar estos días como no lectivos, pero el consistorio y el Consell se opusieron por la posibilidad de generar contagios. Este lunes se volvió a reunir el órgano educativo, que rechazó la urgencia de votar la propuesta del cambio, por lo que el martes la Junta Local de Gobierno cedió y confirmó que la semana de la Magdalena no sería lectiva – a excepción del lunes - y se pondrían en marcha ‘escoletes’ para favorecer la conciliación laboral.Eso sí, es posible que en el segundo semestre se celebren unas fiestas de la Magdalena reinventadas. El 14 de enero, durante la reunión entre el ayuntamiento y el món de la festa, se acordó suspender todo el calendario festivo hasta mayo, pero también un nuevo encuentro ese mes en el que se analice la situación y la viabilidad de recuperar parte de los actos suspendidos. De hecho, la alcaldesa, Amparo Marco, ha señalado en varias ocasiones que mayo o septiembre podrían barajarse, aunque siempre ha dejado claro que todo dependerá de la evolución de la pandemia porque “la salud es lo primero”.