Castelló de la Plana destaca, entre otras cosas, por su eficaz plan de movilidad urbana sostenible. Gracias a esta iniciativa, ya fue reconocida en 2019 la segunda mejor ciudad accesible europea al quedar tan solo por detrás de Varsovia. Así, la ciudad ha querido seguir mejorando en cuanto a la movilidad de la ciudad para convertirse en un ejemplo de sostenibilidad urbana. El pasado 15 de septiembre, Castelló se sumó a la semana europea de la Movilidad 2020 con un nuevo curso online y el Día Sin Coches. Se creó un curso online sobre movilidad sostenible dirigido al alumnado de Primaria, que pretendía sensibilizar sobre tres cuestiones fundamentales: la movilidad sostenible y su repercusión sobre el cambio climático; las normas de seguridad vial y especialmente las medidas de seguridad frente a la covid-19; y la importancia de los caminos escolares. El Día sin Coches se desarrolló como una reivindicación del espacio público para el peatón y en el que se cortaron varias calles de la ciudad.Cabe recordar que La Comisión Europea fijó dos ambiciosos objetivos para la movilidad urbana, que son la eliminación progresiva de automóviles de combustible convencional en las ciudades para 2050; y avanzar hacia la logística urbana de cero emisiones en los principales centros urbanos para 2030.El regidor de Transición Ecológica del Ayuntamiento de Castelló, Fernando Navarro, expuso el 12 de diciembre el informe de emisiones de 2018, correspondiendo al primer Pacto de Alcaldes por el Clima y la Energía de Europa de 2030. Este informe contabiliza un total de 184.234 toneladas de C02, un 13% menos que en 2008, teniendo en cuenta que no se han contabilizado las emisiones del transporte privado. El alumbrado público ha protagonizado una reducción de un 40% (de 6.143 a 3.706), que en el ámbito público compensa el aumento del 6% del consumo en edificios municipales a causa de un incremento de los mismos (de 2.324 a 2.471). Por otro lado, el sector servicios ha disminuido un 25% (de 124.097 a 92.895), mientras que el doméstico ha crecido un 7, 82%, de (78.987 a 85.162). En definitiva, el sector servicios acapara el 36% de emisiones, el sector doméstico el 27%, el transporte un 37% y el alumbrado y dependencias públicas solo un 3%.Sin embargo, Navarro admitió que las actuaciones en infraestructuras públicas han cumplido, pero que solo representan una mínima parte respecto al sector privado (12.351 toneladas de C02 frente a 373.304). Así, el regidor ha destacado la necesidad de profundizar en políticas de planificación que incidan en este sector. Sobre este tema, manifestó que únicamente el 10% de los edificios de más de 50 años han pasado el Informe de Evaluación de Edificios. Navarro resaltó la apuesta para mejorar la eficiencia energética y ha añadido que ahora existe la herramienta legal que permite la creación de comunidades energéticas locales para fomentar el autoconsumo.Castelló continúa trabajando para consolidar a la ciudad como uno de los ejemplos a seguir en el ámbito de la movilidad sostenible. A pesar de los reconocimientos, tanto europeos como nacionales, desde el consistorio se anima a continuar en esta misma línea y seguir trabajando para conseguir esos objetivos y reducir al mínimo las emisiones de los gases que provocan el efecto invernadero.