El sector valenciano de la hostelería comienza a ver la luz al final del túnel. Tras varias semanas de inactividad provocadas por el cierre de los locales de restauración a causa de las estrictas restricciones de la Generalitat, la hostelería podría volver a reabrir en provincias como Castellón a partir del 1 de marzo. A falta de saber las medidas concretas de la reapertura, representantes del Consell y de la hostelería se reunirán de nuevo mañana para exponer sus puntos de vista.Por lo que respecta a la postura de la Generalitat, bares y restaurantes podrán reabrir a partir del lunes 1 de marzo en terrazas y con un horario reducido, aún por concretar, entre las 17 o 18 de la tarde. Por tanto, el interior de los locales se mantendrá cerrado. Así lo ha planteado la Generalitat, en un momento en el que el descenso tanto de casos positivos como de incidencia acumulada permite una desescalada “prudente y lenta”.Por su parte, según ha contado À Punt, el sector de la hostelería propondrá mañana que en las terrazas puedan sentarse entre 4 y 6 personas por mesa. No obstante, las peticiones de la hostelería en esta mesa de negociación se aceptaran o no en la mesa interdepartamental de este jueves, una vez se reflexione sobre las medidas correctas para esta situación de pandemia en la que, como ha expresado en reiteradas ocasiones el president de la Generalitat, Ximo Puig, la desescalada será prudente porque "no podemos volver atrás después de todo el esfuerzo de la sociedad valenciana".El pasado 16 de febrero el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) denegó la petición de abrir cautelarmente la hostelería en las tres provincias valencianas. Cosa que había solicitado el día anterior la Ashocas (Asociación de Hosteleros y Empresas de Ocio Nocturno de Castellón), y por lo que desconvocó de forma oficial la apertura de los bares y restaurantes de Castelló y algunos municipios de València.Habrá que esperar hasta mañana para saber en que se concretan las demandas de la hostelería en la reunión que mantendrán con representantes del Consell. Lo que sí que está claro, es que se iniciará una desescalada prudente para que poco a poco vayan abriendo los negocios y evitar una situación de crisis aún mayor que la actual.