La Junta de Gobierno Local (JGL) del Ayuntamiento de Castellón ha aprobado la adjudicación a la empresa Telecso de las obras de mejora en el Mercat de Sant Antoni. Unos trabajos que rehabilitación y reforma de este recinto comercial del centro de la capital castellonense que tendrán un importe de 372.374 euros, financiado con los remanentes sobrantes de los fondos europeos Next Generation, procedentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
El plazo de ejecución de las obras será de cinco meses y "se aprovechará el cierre del mes de agosto para acometer el grueso de las obras y así minimizar su impacto en la actividad del mercado", ha declarado Vicent Sales, portavoz del Gobierno municipal durante la rueda de prensa posterior a la JGL que se ha celebrado este miércoles.
"El resto de meses, hasta que acaben los trabajos, se podrá compatibilizar las obras con la actividad de venta, tal y como ocurrió durante las obras del Mercado de Abastos, haciendo posible que los propietarios no pierdan oportunidades de venta”, ha añadido.
Obras de mejora en el interior y el exterior del recinto
La remodelación integral de este mercado dará paso a una nueva imagen de este recinto comercial de la ciudad que abrió sus puertas en el año 1960. Así, las obras que empezarán en los próximos meses permitirán ejecutar mejoras tanto en el interior del mercado como en el exterior, tal y como explicó la corporación municipal el pasado mes de mayo durante una reunión con los comerciantes que prestan servicio en este mercado.
“Este proyecto va a permitir adaptar este mercado, que nació a principios de los años 60 y que ha contado con varias reformas a lo largo de estos años, para adaptarlo a las necesidades y condiciones de eficiencia energética, accesibilidad y seguridad propias del siglo XXI, mejorando la experiencia tanto para clientes como para los propios vendedores y abriéndolo a nuevos usos de tipo gastronómico que puedan atraer otro tipo de clientes, como turistas, además de los que realizan sus compras de manera habitual en él”, destacó la alcaldesa Begoña Carrasco durante el encuentro.
Así, tras las obras de renovación el Mercat de Sant Antoni estrenará un nuevo aspecto como un recinto comercial adaptado al siglo XXI, moderno y con 374 metros cuadrados de instalaciones entre las que habrán hasta diez puntos de venta, una zona de degustación, baños adaptados y un cuarto destinado a la limpieza y a los residuos.
Los trabajos que se desarrollarán en el exterior del mercado crearán una nueva celosía de cerámica y el proyecto también contempla la renovación del pavimento de gres porcelánico. Además, la principal novedad del recinto será la instalación de persianas en cada uno de los puntos de venta con la finalidad de que cada uno “pueda trabajar en franjas horarias distintas sin interferir la apertura de unos u otros”, detalló durante el encuentro con los vendedores Sergio Toledo, edil de Urbanismo.