La Diputación de Castellón atenderá por completo el abono del importe de las subvenciones económicas asignadas para el funcionamiento de las Unidades de Respiro y de Conciliación Familiar, cuya actividad se ha visto afectada por los efectos de la pandemia del coronavirus (Covid-19). Así lo destaca la vicepresidenta y responsable del área de Bienestar Social, Patricia Puerta, quien adelanta que seatenderán todas las ayudas con efecto retroactivo a 1 de enero de 2020.Patricia Puerta ha remitido sendas cartas a los ayuntamientos de la provincia, una referida a las Unidades Municipales de Respiro Familiar y otra a las Unidades Municipales de Conciliación Familiar, para informar a las entidades locales de una medida "que consideramos importante para dar estabilidad a un servicios que desarrollan un papel notable en nuestros pueblos, por lo que supone para la atención de nuestros mayores".El vigente estado de alarma, como ha pasado en otras actividades, ha comportado, por necesaria, la suspensión de las actividades en ambos servicios, actualmente financiados por la Diputación de Castellón. En el caso de las Unidades de Respiro Familiar, operativas en 81 municipios de la provincia, y en el de las de Conciliación Familiar, en diez localidades.Así, tras las dudas planteadas por los ayuntamientos a la Diputación, en el escrito remitido desde la institución provincial, suscrito por la vicepresidenta, se resalta que la convocatoria de subvenciones económicas destinadas a dichos servicios para 2020 -en la actualidad en estado de tramitación e inmediata aprobación- atenderá los efectos económicos derivados de su funcionamiento, con efectos retroactivos a 1 de enero de 2020.Con ello, según expone Patricia Puerta, "se garantiza el abono del importe de la subvención económica asignada de igual modo que si el servicio se estuviera prestando de forma normalizada".