La concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Peñíscola ha encargado un estudio y un proyecto de restauración y protección de los grafitos navales encontrados en los años noventa en el Muro de Santa Bárbara, con el objetivo de evaluarlos, restaurarlos y trazar un plan de puesta en valor de los mismos."Tras emprender diversas mejoras en el Museo del Mar de la localidad, su modernización y reinterpretación, hemos considerado indispensable seguir con la puesta en valor de nuestro patrimonio como pueblo marinero, estudiando y valorando los grafitos navales que se encuentran en las proximidades del Museo, para llevar a cabo una posterior intervención de restauración y puesta en valor para su divulgación; además, Patrimonio ya ha elaborado un informe preliminar en el que se advierte la necesidad de restaurarlos y no vamos a esperar a que otras administraciones se decidan o no a hacerlo, aunque son ellas las competentes" ha explicado el edil del área, Ramon Simó.
Datarían de los siglos XVIII o XIX y son muy poco comunes
Durante el mes de febrero del presente año, la Dirección General de Cultura y Patrimonio de la Generalitat llevó a cabo un informe sobre los grafitos, en el que se refiere la necesidad de intervenir en ellos para su restauración.Éstos se encuentran grabados en el Muro de Santa Bárbara, entre el Baluarte Nuevo y el del Príncipe y sobre el acantilado, en dos tramos del muro dispuestos en bandas horizontales de altura variable entre 40 y 70 centímetros.Se encuentran sobre un enlucido de cal, existente a lo largo de la cara exterior del muro y se han contado hasta setenta y cinco figuras entre las que se distinguen varios tipos de naves, que pertenecen a modelos fundamentalmente del siglo XVIII y XIX según datos aportados en un trabajo de investigación realizado desde el Servicio de Investigaciones Arqueológicas y Prehistóricas de la Diputación de Castellón.El mismo informe confirma que este tipo de grabados "no son numerosos en nuestra Comunidad, ni en toda las costa mediterránea, lo que revaloriza su innegable interés cultural, además de que los grafitos son ya parte consustancial de la Muralla de Santa Barbara declarada Bien de Interés Cultural".Tras conocer este informe, el pasado mes de marzo, Simó mantuvo una reunión en Valencia con los técnicos de la misma Dirección General a quienes informó de la voluntad del consistorio de estudiar los grafitos para su protección, puesta en valor y divulgación y fue en ese mismo encuentro cuando se puso sobre la mesa la posibilidad de solicitar una subvención autonómica que contribuyese a sufragar parte de los costes del estudio y de la ejecución de la obra de restauración.Tras este encuentro, Simó procedía a entrevistarse con la arquitecta restauradora Pepa Balaguer, responsable de los principales estudios e intervenciones en el patrimonio local de los últimos años; a quien solicitó el citado estudio de los grafitos y posterior proyecto de restauración.Tras el encargo, el consistorio ha aprobado en la última junta de gobierno local concurrir a la convocatoria de ayudas de la Generalitat Valenciana, para museos y colecciones museográficas permanentes así como para bienes inmuebles de la Comunitat, para sufragar parte de los costes del estudio solicitado, garantizando la disponibilidad de recursos económicos del área municipal de Cultura para asumir los costes del estudio a los que no de cobertura la subvención, así como a los costes propios de la obra de restauración, "al menos vamos a intentar que quien tiene competencias en Patrimonio destine los recursos a esta intervención que impulsamos desde la administración local, ya que tenemos experiencia en interveciones de protección del patrimonio para las cuales llevamos años esperando una actuación de la Generalitat, como en la zona de la Porteta" ha señalado Simó.