El Ayuntamiento de Vila-real ha ejecutado una primera fase de obras de modernización y mejora de las infraestructuras del polígono situado en el entorno de la estación del ferrocarril donde el equipo de gobierno planea la creación de un clúster agroalimentario y tecnológico. Así lo ha anunciado hoy el alcalde de la ciudad, José Benlloch, durante la visita que ha realizado para comprobar el resultado del proyecto de mejora, acompañado por el concejal de Territorio, Emilio M. Obiol, y representantes de las empresas Ingestec, que gestiona la asesoría técnica de la oficina de reindustrialización, y Pavasal, adjudicataria de las obras.El proyecto de mejora ha supuesto una inversión de 180.000 euros, subvencionada por el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace), en el marco del plan de reindustrialización municipal impulsado por el equipo de gobierno. En este sentido, el alcalde ha destacado que desde 2018, han sido un total de 4 millones de euros invertidos en 8 proyectos de mejora y modernización de zonas industriales en colaboración con el Ivace, que también han supuesto una transformación de los accesos a la ciudad. Benlloch ha agradecido la implicación de la Generalitat Valenciana para poder llevar a cabo estas inversiones. En el caso del polígono situado en el entorno de la estación de ferrocarril, Benlloch ha anunciado que esta actuación de mejora ejecutada es la primera fase de un plan para convertir esta zona en un clúster agroalimentario y tecnológico, “porque creemos que éste puede ser un polígono de éxito que atraiga nuevas inversiones”.El alcalde ha subrayado que la intervención realizada mejora las condiciones de las empresas ubicadas en el polígono, algunas de las cuales se dedican al sector citrícola, como por ejemplo la cooperativa Real Export o el comercio de naranjas Pascual Gil, además de la empresa de economía social Vilamico, impulsada por la Fundación Manantial, para ocupar a personas con enfermedad mental a través del cultivo de champiñones. En este sentido, las obras suponen una mejora de las condiciones de seguridad para el acceso de los trabajadores y trabajadoras de estas empresas. Benlloch ha destacado el potencial de este polígono para atraer inversiones “ahora que Vila-real está de moda por los buenos datos de ocupación que tenemos”, a pesar de que ha incidido en que “primero es necesario dotar en esta zona de todas las condiciones necesarias porque las empresas puedan instalarse” y por eso el Ayuntamiento tiene previsto ejecutar nuevas fases de modernización.El alcalde ha recordado que cuando el equipo de gobierno diseñó hace cinco años la modificación del Plan General de Ordenación Urbana para desactivar el riesgo urbanístico millonario y dar salida a todas las reservas de aprovechamiento comprometidas por el anterior gobierno del Partido Popular, “planteamos convertir parte de esta zona en viviendas, pensando que la zona residencial de la ciudad podría crecer hacia este lado de la vía del ferrocarril”. Con todo, Benlloch reconoce que “en este momento, la ciudad ya no es la misma, y ahora no tiene sentido apostar por la construcción de viviendas en este punto, ya que puede ser una zona atractiva para la inversión industrial”. De esta manera, Benlloch ha confirmado que el consistorio trabaja para corregir el planteamiento inicial de la modificación del PGOU y apostar por un clúster agroalimentario y tecnológico.El concejal de Territorio ha explicado que la obra realizada ha consistido sobre todo en la mejora del alumbrado con tecnología led, así como la accesibilidad, con la construcción de aceras y reordenación viaria. También se ha instalado una pantalla verde en la calle Dones del Magatzem, se han reasfaltado viales y se han señalizado las calles. La superficie total del polígono es de 156.880 metros cuadrados y desde el equipo de gobierno destacan su ubicación estratégica, con buenas conexiones viarias a través de la N-340, un acceso cercano a la AP-7, así como a la ronda Suroeste que en breve estará operativa.