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Martí muestra el éxito de 'Castelló Ruta de Sabor' en unas jornadas de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias celebradas en Morella

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Diputació Castello Ruta de Sabor
La diputada provincial de Turismo, Virginia Martí, ha defendido hoy en Morella «el éxito de 'Castelló Ruta de Sabor'», que en la actualidad cuenta con 420 integrantes, 277 del sector turísticos y 143 del agroalimentario. Se trata de un «proyecto de gran dinamismo y en constante crecimiento» que en el primer semestre de 2022 ha registrado 45 nuevas incorporaciones: 39 del sector turístico y 6 del agroalimentario. En estos momentos, el Patronato Provincial de Turismo prevé alcanzar una cifra de entre 450 y 470 integrantes a finales de año.Así lo ha expuesto durante su intervención en la jornada que la Federación Valenciana de Municipios y Provincias ha celebrado en el Cdt de Morella con el epígrafe de 'Turismo como estrategia de Desarrollo Local', donde ha explicado la estrategia de desarrollo local que emprende la Diputación de Castellón, con el turismo como estrategia.Una hoja de ruta que cuenta con cinco pilares básicos:→ la vertebración del territorio con 8 planes de dinamización y gobernanza turística.→ la apuesta por la diversificación y la desestacionalización.→ el impulso a la colaboración público-privada con clubs de producto como 'Castelló Ruta de Sabor' y 'Castelló Cycling'.→ la captación de fondos europeos.→ la inteligencia turística mediante el impulso a la vertical de turismo de la Plataforma IoT (Internet of things) y la adhesión a la Xarxa DTI para dar cobertura a los municipios y espacios de la provincia.La diputada ha explicado que los 8 planes de gobernanza suponen una inversión para el periodo 2019-2023 de 2.560.000 €. Cuatro planes son de nueva creación para el periodo 2020-2023: Maestrat, Plana de l'Arc, Penyagolosa, y Castelló Sud; los otros cuatro son de continuidad: Els Ports, Alt Maestrat, Espadà-Millars i Alto Palancia.En lo referente a diversificación y desestacionalización, Martí ha apuntado a que «el paradigma del consumo ha cambiado y el turista busca en la actualidad espacios abiertos y poco masificados que le permitan estar en contacto con la naturaleza y realizar actividades deportivas en las que el contacto humano resulta muy valorado». En este contexto, «los productos de proximidad y la gastronomía se consolidan como valor diferencial de los destinos».