Castellón ha escalado posiciones en el ranking de las provincias con mayor número de multas de tráfico por exceso de velocidad. Según los últimos datos oficiales correspondientes a 2024, recogidos en un informe de AEA (Automovilistas Europeos Asociados) sobre los radares que más denuncias generan en España, la provincia castellonense ha registrado un total de 68.958 sanciones interpuestas en el último año. De hecho, tres de ellos se cuelan entre los 50 más activos de todo el país. A continuación, te explicamos cuáles son.
El radar que más multas ha tramitado en Castellón en el último año se encuentra en el kilométro 356 de la AP-7. Este dispositivo, situado en uno de los tramos con mayor volumen de tráfico de la autopista, registró nada menos que 16.704 infracciones por exceso de velocidad. A este se le suma el radar instalado en el kilómetro 1.010 de la carretera N-340, también en la provincia, que cerró el año con 16.287 sanciones. Ambos dispositivos concentran, por sí solos, casi la mitad de las multas impuestas en toda la red provincial. El tercero en la lista es otro radar de la AP-7, ubicado en el kilómetro 390, que acumuló 11.716 denuncias.
Estos datos evidencian que tanto la AP-7 como la N-340 son las vías con mayor control de velocidad en Castellón. En el caso de la AP-7, se contabilizaron más de 33.000 multas repartidas entre varios tramos muy próximos entre sí, como el 374 y el 390. En la N-340 ocurre algo similar; además del kilómetro 1.010, también destacan los radares de los kilómetros 960 y 948, que suman más de 2.300 sanciones adicionales.
La autovía A-23 tampoco escapa al radar. En apenas 10 kilómetros, desde el 17 al 26, hay al menos cinco dispositivos activos que juntos superan las 15.000 infracciones anuales. Esto convierte este tramo de la autovía en uno de los más vigilados y sancionados de toda la Comunitat Valenciana. En menor medida, también se han detectado importantes cifras de sanciones en otras carreteras como la CV-149, la CV-18 o la N-225, aunque con una incidencia más baja.
Carreteras de alto riesgo en la provincia
Pero más allá de las multas, lo preocupante es que varios de estos tramos coinciden con zonas especialmente peligrosas de la red viaria castellonense. De hecho, según el informe EuroRAP elaborado por la Fundación RACE, la provincia de Castellón cuenta con uno de los tramos de carretera más peligrosos de toda España.
Se trata de la N-340 en el tramo comprendido entre los kilómetros 940 y 952, entre los municipios de Benifairó de les Valls y Almenara, que se extiende entre las provincias de Castellón y Valencia. Este segmento ha sido calificado como “tramo negro” por su alta siniestralidad y figura como el segundo más peligroso del país.
Además, en el interior de la provincia también se han detectado puntos críticos. La carretera N-234, en los alrededores de Jérica, especialmente en los kilómetros 24 y 30, presenta una elevada peligrosidad según las estadísticas de siniestros. También la N-232, en el kilómetro 64, ha sido señalada como un tramo con riesgo significativo de accidentes graves.