Un monumental Nacimiento cambiará por completo la imagen de la plaza de las Aulas de Castellón a partir del 12 de diciembre. La instalación, ideada por el escultor burrianense Vicente Martínez, se perfila como uno de los grandes reclamos de la Navidad en la ciudad gracias a sus dimensiones colosales y a una propuesta interactiva que promete sorprender tanto a vecinos como a visitantes.
Las piezas de esta escena impulsada por la Diputación de Castellón, todavía en fase final de montaje, ya dejan entrever el impacto visual que tendrá la obra cuando quede instalada por completo. El conjunto reproduce la escena tradicional del Nacimiento, aunque lo hace desde una escala poco habitual.
La figura de San José alcanzará los 9 metros de altura y se convertirá en uno de los elementos más visibles desde distintos puntos del centro de Castellón. A su lado, la Virgen María —representada sentada— llegará a los 5,9 metros. El diámetro total de la composición rozará los 7 metros e incluirá áreas decorativas y un sistema de iluminación diseñado para resaltar los detalles de cada figura cuando caiga la noche.
Escultura gigante con sello local
La obra ha sido construida con materiales de última generación, combinando fibra de vidrio y una estructura metálica interna que garantiza estabilidad sin renunciar a la ligereza necesaria para su montaje y posterior desmontaje.
Martínez, conocido por su trabajo en fallas y esculturas monumentales, ha trasladado su experiencia a este proyecto navideño, que busca captar la atención desde el primer vistazo. Su estilo, marcado por las proporciones extremas y el cuidado por los acabados, se aprecia en cada uno de los elementos que formarán parte del Belén.
Quienes han seguido de cerca el proceso de creación destacan que el escultor ha apostado por una estética que mezcla tradición y espectacularidad. El objetivo no es solo decorar un espacio emblemático del centro de la ciudad, sino convertirlo en un punto de encuentro durante las semanas previas a las fiestas.
Una experiencia musical y luminosa
Más allá del impacto visual, la propuesta incorpora un componente interactivo que invita al público a participar. La instalación “La Sinfonía del Nacimiento” contará con doce campanas distribuidas alrededor de la escena. Cada una emitirá una nota distinta y, al combinarlas, los visitantes podrán intentar reproducir una breve melodía inspirada en un villancico.
Si se consigue completar la melodía, el Nacimiento se iluminará con efectos especiales y proyecciones láser que envolverán toda la escultura. Este formato busca que el público no solo observe, sino que juegue y se integre en la experiencia. El Belén Monumental podrá visitarse del 12 de diciembre al 6 de enero y se espera que se convierta en uno de los escenarios más concurridos de la Navidad castellonense.