El pasado 28 de mayo,
Samuel Falomir, candidato a la alcaldía de l’Alcora por el PSPV-PSOE alcanzó la mayoría absoluta, aumentando además su representación. Las elecciones municipales permitieron así al también
secretario general del PSPV en la provincia de Castelló revalidar su cargo como alcalde, que ostenta desde 2017. Hablamos con el alcorino para conocer los principales retos del equipo de gobierno que liderará en los próximos cuatro años.
En las elecciones municipales de l’Alcora de 2023 el PSPV-PSOE consiguió 11 concejales, revalidando la mayoría absoluta de 2019 y aumentando 2 ediles. ¿Esperabais estos resultados?
Nosotros éramos muy optimistas porque considerábamos que durante los 4 años hemos hecho una muy buena gestión económica y hemos puesto en marcha infraestructuras importantes para l’Alcora. Y sobre todo con una política muy en proximidad con la ciudadanía, participando casi 24 horas en actos festivos, culturales… en todo lo que nos invitaban. Esperábamos que eso se valorase y así ha sido.
¿Qué es lo que más ha valorado la ciudadanía? ¿Esa proximidad o algún proyecto en concreto?
Yo creo que sobre todo la proximidad, el acudir a todo lo que nos han invitado y también dar una respuesta a todas las inquietudes y preguntas que nos han planteado en la calle. Y yo destacaría especialmente a la gente joven, que ha decantado contar con más representación, porque hemos conectado mucho con ellos, que eran los olvidados. Cuando han planteado preguntas las hemos contestado, ya sea si tienen 14 o 20 años, han tenido una respuesta porque sus inquietudes son importantes para nosotros.
El 17 de junio será la investidura que dará inicio a la legislatura 2023-2027. ¿Qué proyectos son prioritarios?
Pues tenemos sobre todo dos: la Residencia de la Tercera Edad y la Casa de la Cultura. Esos son fundamentales, además de seguir mejorando nuestros polígonos industriales. Además, seguir poniendo en valor la Real Fábrica, que está en primera fase de las obras de rehabilitación del edificio fundacional con una inversión de 100.000 euros; y remodelar la Pista Jardí.
¿Habrá nuevas concejalías?
Sí. Una es la de Vivienda, porque tenemos un problema en el casco antiguo con viviendas abandonadas. Crearemos una oficina donde se puedan solicitar todas las ayudas relacionadas con vivienda que sean del propio Ayuntamiento, de la Generalitat, del Ministerio… y se informe de todo aquello que se desconoce y ayude a la ciudadanía. Y por otro lado, impulsar la construcción de viviendas de protección oficial, poniéndonos en contacto desde el Ayuntamiento con empresas privadas que puedan construirlas para destinarlas a personas vulnerables y jóvenes que puedan iniciar su proyecto de vida aquí.
Por otro lado, vamos a crear la concejalía de Infancia, que es muy importante porque va a englobar todo lo relacionado con la infancia y la adolescencia. Incluirá la concejalía de Educación y Parques y jardines, porque al final se dirigen especialmente a los niños y niñas. Por tanto, será muy transversal en estas áreas. Queremos que en todas nuestras políticas tengamos en cuenta cómo les pueden afectar a la infancia.
Como secretario general del PSPV-PSOE en la provincia de Castelló, ¿cómo se encuentra el partido en estos momentos, tras unas elecciones con pérdida de representación del PSPV en los municipios y de la Diputación y a las puertas de las elecciones generales del 23J?
Bueno, la verdad es que está claro que son ciclos. En 2011 tuvimos una ola en la que perdimos muchos ayuntamientos, en 2015 recuperamos muchos ayuntamientos y en 2019 recuperamos aún más esos consistorios. En lugares donde en 2015 teníamos pueblos donde no éramos la fuerza más votada y en 2019 lo conseguimos.Ahora, en 2023, nos ha pasado lo mismo que en 2011. independientemente de las políticas de los municipios hay otras circunstancias a nivel nacional que pueden influir en los resultados, en la manera en que la gente decide qué votar. La marca PSOE, por algunas decisiones o cuestiones que se salen del municipio, han hecho que se castigase de forma injusta a nuestros alcaldes y alcaldesas. Pero tenemos claro que, estemos donde estemos, tenemos que estar al lado de la ciudadanía. Si es en el gobierno, seguir cumpliendo con los retos y liderar la mejora de los municipios, y si estamos en la oposición, serlo de forma constructiva y contundente, que sea capaz de ilusionar más que el gobierno actual a la ciudadanía para revertir esa situación.
¿Considera que hay miedo al cambio? Muchos ayuntamientos habían impulsado medidas pioneras.
Los cambios son complicados de entender y cuando se llevan a cabo necesitas tiempo para que la ciudadanía entienda el valor que tienen y la diferencia que suponen respecto a antes. Hay compañeros de partido que han hecho algo dos o tres meses antes de elecciones y yo personalmente no las haría porque cuesta entender ese cambio.Por ponerte un ejemplo, en l’Alcora reformamos el centro y nunca se me hubiese ocurrido acabar esa intervención dos o tres meses antes de elecciones, por eso lo hicimos a mitad de legislatura. El PP prometía revertir la obra y no han conseguido mayoría absoluta. La gente ha entendido que esta reforma ha mejorado la calidad de vida de la gente.
En la nueva legislatura serás portavoz del PSPV-PSOE en la Diputació de Castelló, esta vez desde la oposición. ¿Qué va a defender especialmente la formación en estos cuatro años?
Sobre todo, tener en cuenta que la Diputación tiene que servir a todos los municipios de la provincial, pero especialmente a los más pequeños. Eso lo tengo clarísimo. Porque son los que tienen más problemas y más falta de recursos. La Diputación debe estar a su lado.Y que sea una Diputació de todos los ayuntamientos, que no volvamos al viejo pasado cuando la Diputació solo ayudaba a pueblos donde gobernaba el mismo partido o donde había amistad con el alcalde o con la alcaldesa. Yo espero que sea así, que haya esa mirada de que todos los municipios somos iguales independientemente del signo político.Desde la oposición intentaremos que la Diputació sea todavía más útil para la ciudadanía, para los ayuntamientos, y con una discriminación positiva para esos pueblos mś pequeños que pueden mejorar con la ayuda de la Diputació.
