A falta de dos semanas, la Magdalena lectiva continúa en el aire
El Ayuntamiento y Educación no dejan claro si finalmente el alumnado tendrá vacaciones del 9 al 12 de marzo
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Aunque era de esperar, no fue hasta el 14 de enero cuando el Ayuntamiento de Castelló y el món de la festa acordaron la suspensión de las fiestas de la Magdalena 2021, que este año se hubiese celebrado del 6 al 14 de marzo. Una decisión motivada por la pandemia del coronavirus que, sin embargo, deja abierta la posibilidad de que se celebren durante el segundo semestre del año, por lo que ha puesto sobre la mesa si la semana de Magdalena debe ser lectiva o no.Con dos semanas de margen, esta cuestión continúa en el aire porque las dos administraciones competentes, el Ayuntamiento de Castelló y la Conselleria d’Educació, no toman una decisión ni dejan claro quién tiene competencias para establecer la festividad. Mientras que el consistorio insta a la conselleria de Vicent Marzà a que decida, el conseller este mismo miércoles señalaba en rueda de prensa que su área no puede tomar una decisión si no hay una propuesta formal.Aunque el 8 de marzo está confirmado que se mantendrá como festivo local para todos y todas, padres, madres y familias siguen con la duda de qué pasará con los días 9, 10, 11 y 12, en los que se habrían celebrado las fiestas fundacionales en condiciones normales. Y es que el 20 de enero el Consejo Escolar acordó en una reunión extraordinaria mantener como no lectivos esos días, tras una primera votación empatada a favor y en contra y una segunda en la que se desempató a favor de que la semana fuese no lectiva.Al anunciar la decisión del consejo, desde el ayuntamiento se insistió en que se trata de un órgano consultivo y no vinculante y que esta cuestión se abordaría igualmente en el seno de la Junta de Gobierno, que se reúne cada jueves. Al respecto, hace dos semanas el portavoz del equipo de gobierno, José Luis López, explicó que el Acord de Fadrell, “entendiendo la inquietud que supone este tema”, envió una carta a la Conselleria d’Educació y otra a la Conselleria de Sanitat apelando a su “sensibilidad” para que acordasen una decisión.Así lo manifestó también la semana pasada la alcaldesa, Amparo Marco, que explicó que “no hay fiestas, por lo que lo lógico es suspender las clases. Además, el problema es que al no ser festivos, los padres de estos niños tendrán que trabajar y probablemente tendrán que quedarse con sus abuelos, pero hay que protegerles de la pandemia”. Marco insistió en que “no es una situación normal” y reiteró que el consejo es consultivo y es la conselleria quien debe decidir.Por su parte, Marzà acudió este miércoles a la UJI a presentar el nuevo Centro de Innovación Educativa y Tecnologías Digitales y dejó claro que esta decisión no puede tomarla la Conselleria. “Nosotros lo que hacemos es aprobar una propuesta formal, aprobaremos lo que nos traslade el Consejo Escolar”, subrayó, en respuesta a la petición de sensibilidad y no al envío de una propuesta formal y concluyente. En este sentido, apeló a la “racionalidad” e instó al Consejo Escolar a elevar una propuesta: “hay que pensar bien si es mejor o peor que estos días sean lectivos”.Ayer, López volvió a defender que el Consejo Escolar es consultivo, de ahí que solo se haya elevado esta petición de sensibilidad. “Queremos que nos digan qué podemos hacer, porque la situación es excepcional pese a que los datos son algo mejores. Queremos que se organicen como puedan, pero necesitamos una solución”, instaba, y añadía que cuentan con la posibilidad de que sea el Consell y no la Conselleria de Educación quien tome una decisión “cuanto antes”.Por tanto, si no se toma una decisión desde la administración competente, el 9, 10, 11 y 12 de marzo no habrá clases en los centros educativos de la capital de la Plana, junto con el 8, festivo local de Magdalena, aunque en las dos semanas de margen podría haber cambios.
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