Castellón suma desde este martes 116 nuevas plazas de aparcamiento junto a la estación de tren y autobuses, un espacio que reordena uno de los puntos con mayor tránsito de la ciudad tras varios años de quejas y reclamaciones vecinales por la falta de estacionamiento en la zona. El parking, que ya está operativo, cuenta con más de 5.500 metros cuadrados.
La alcaldesa, Begoña Carrasco, y la presidenta de la Diputación, Marta Barrachina, —las dos instituciones que han financiado las obras con un presupuesto superior a los 590.000 euros— han visitado el aparcamiento junto al primer teniente de alcalde y concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Sergio Toledo, además del teniente de alcalde del distrito oeste, Vicent Sales.
Durante la visita, Barrachina ha señalado que “la actuación responde a una necesidad planteada por los vecinos del entorno y mejora la movilidad en un punto con mucho movimiento diario”. Por su parte, la primera edil ha destacado que los trabajos “permiten cerrar una demanda que llevaba años pendiente” y ha subrayado la colaboración entre administraciones.
Un entorno con alta demanda de estacionamiento
El área donde se han habilitado las plazas concentra varios puntos de atraque de viajeros, tanto en ferrocarril como en autobús, además del CEIP Jaume I. La actividad diaria en este eje generaba, según remarcan los responsables municipales, problemas recurrentes de estacionamiento y recorridos de acceso poco definidos.
Así, la actuación ha incluido la creación de dársenas de aparcamiento y una red viaria interna que ordena el tránsito hacia las diferentes zonas. También incorpora un sistema de drenaje sostenible (SUDS) destinado a mejorar la evacuación del agua en episodios de lluvia. En total, se han habilitado 116 plazas, seis de ellas reservadas para personas con movilidad reducida.
Además, la zona cuenta con 758 metros cuadrados de áreas verdes, plantación de 750 unidades y 28 árboles. Se han instalado 27 luminarias, bancos, papeleras, aparcabicis y dos puntos de recarga eléctrica para vehículos. Tanto Barrachina como Carrasco han insistido que este equipamiento mejora la entrada a la ciudad para los usuarios que llegan en transporte público.
“Es un espacio que muchos residentes llevaban tiempo pidiendo. La apertura permitirá descongestionar calles próximas y facilitar la movilidad”, apuntó Carrasco durante su intervención. La alcaldesa también recordó que la obra se encontraba “atascada desde hacía años” y valoró que “pudiera desbloquearse para responder a las peticiones del barrio”.
Cooperación institucional
Los trabajos se han ejecutado mediante el Plan Impulsa, una herramienta de la Diputación que financia actuaciones de mejora urbana e infraestructuras en los municipios de Castellón. Barrachina ha resaltado la importancia de esta línea de apoyo y ha afirmado que “permite a los ayuntamientos avanzar en proyectos que, por sí solos, tendrían más dificultades para asumir”.
Ambas responsables han puesto en valor la colaboración entre administraciones. “Seguiremos trabajando con los 135 municipios para que actuaciones de este tipo sean posibles”, ha enfatizado Barrachina al tiempo que ha citado el impacto de la estación para los 620.000 usuarios que la utilizan como punto de partida o llegada.
Carrasco, por su parte, ha señalado que “la coordinación técnica y financiera ha sido clave para cumplir los plazos y llegar al resultado que hoy se presenta”. También ha agradecido “el respaldo recibido” para actuar en un enclave que calificó de “estratégico” para quienes viven o trabajan en el entorno.