El Pleno del Ayuntamiento de Benicarló aprobó ayer la derogación de la tasa por ocupación de vía pública, que afectaba principalmente a las terrazas de establecimientos de hostelería y comercio local. El concejal de Hacienda, Borja Castell, ha explicado hoy en rueda de prensa que esta medida «no es solo una rebaja o un beneficio fiscal, sino un instrumento para la reactivación económica del municipio».
Castell ha subrayado que «la hostelería y el comercio local son sectores estratégicos para Benicarló, que generan puestos de trabajo, dan vida a las calles e impulsan el turismo» y ha remarcado que «el objetivo del equipo de gobierno es facilitar la apertura de nuevos negocios y mantener los que ya están en funcionamiento».
Además de esta medida, el Pleno también aprobó otros ajustes fiscales para fomentar la actividad económica y social del municipio:
Por un lado, una bonificación del 30% del IBI para actividades económicas declaradas de interés cultural, artístico, histórico o social, como librerías, galerías de arte, salas de teatro o entidades dedicadas a la atención a personas mayores o con discapacidad.
También se aprobó una bonificación en el impuesto de vehículos del 75% para vehículos eléctricos y del 50% para vehículos híbridos, con el fin de incentivar la movilidad sostenible y reducir el impacto ambiental.
Finalmente, también se aprobó una revisión de la tasa de residuos, que reduce la presión fiscal sobre las actividades económicas y las viviendas.
El concejal de Hacienda ha destacado que «estas son las primeras medidas de un paquete más amplio de medidas de política fiscal que el Ayuntamiento está estudiando», y ha concluido que «todas ellas van orientadas a apoyar la actividad económica, la sostenibilidad y el bienestar de la ciudadanía».