Colomer pone en valor la recuperación de la Real Fábrica como revulsivo turístico y cultural

Francesc Colomer, acompañado por el alcalde, Samuel Falomir, la concejala de Cultura, Ana Huguet, y el director del Museu de Ceràmica de l’Alcora, Eladi Grangel, ha visitado esta mañana la Nave de los Hornos de la Real Fábrica, primer espacio de la manufactura condal restaurado, acondicionado, equipado y abierto al público.Se trata de un conjunto extraordinario desde el punto de vista patrimonial por su monumentalidad y cronología (construidos entre 1798 y 1805 y en uso hasta principios de la década de 1970) y también desde el punto de vista turístico.El secretario autonómico de Turismo ha puesto en valor el proyecto de recuperación de la emblemática fábrica, precursora del sector cerámico de la provincia de Castellón, como revulsivo turístico, cultural y social y ha puesto a l’Alcora como ejemplo de recuperación patrimonial.Así, Colomer ha destacado el “gran trabajo” que se está realizando en esta fábrica “absolutamente emblemática e icónica”, una labor de “reconexión emocional con la historia industrial de la ciudad” que responde a una “estrategia perfectamente diseñada para que l’Alcora refuerce su posicionamiento, su identidad y su papel en el ámbito del turismo”.En palabras del responsable autonómico: “El turismo en el mundo postcovid buscará espacios singulares y relatos únicos, auténticos y, en eso, l’Alcora aporta todo un caudal de emociones. Muchas veces definimos el turismo como una fábrica de emociones y, probablemente, en esta ciudad y en este espacio esto tiene un significado muy especial”.La Real Fábrica “es un proyecto muy ilusionante, de gran recorrido, con el que nos sentimos muy identificados. Constituye un producto turístico de primer nivel y estamos encantados de contribuir a su materialización”.Cabe recordar que el proyecto de rehabilitación de la Nave de los Hornos culminó con el su equipamiento para convertirla en zona de acogida de visitantes, centro de interpretación de la fábrica y punto de inicio de las diferentes rutas turísticas que giran en torno al patrimonio industrial, una iniciativa que ha contado con una subvención de Turisme Generalitat Valenciana.Por su parte, el alcalde ha agradecido la visita, sensibilidad e implicación del secretario autonómico con l’Alcora y su patrimonio. Falomir ha resaltado que “la recuperación de la ‘Fàbrica Gran’ nos va a permitir diseñar una interesante oferta turística alrededor de nuestro rico patrimonio cerámico, industrial y natural, con la que esperamos atraer a un importante número de visitantes. Algo que, a su vez, repercutirá en beneficio de la economía local, la hostelería, el comercio, etc.”.Con el elemento cerámica como eje de la política turística del Ayuntamiento, en 2016 se redactó el primer Plan Estratégico de Turismo de l'Alcora, que entre sus conclusiones ya destacó la importancia para el desarrollo turístico del municipio de la recuperación y puesta en valor del edificio de la Real Fábrica.Además de este proyecto, durante los últimos años, ya han empezado a desarrollarse recursos turísticos y patrimoniales vinculados a la actividad cerámica de l'Alcora. En 2017, con la colaboración de Turismo Generalitat Valenciana, se señalizó la Ruta Urbana del Patrimonio Industrial: 10 puntos informativos situados en espacios del casco urbano de l'Alcora donde se explica el impacto de la cerámica en nuestra población a nivel histórico, urbanístico, artesanal, industrial, tecnológico, comercial, demográfico, etc.Entre 2018 y 2019, también con la ayuda de Turismo Generalitat Valenciana, se completó la Ruta Natural del Patrimonio Industrial, de recorrido circular, que cuenta con 33 paneles explicativos y discurre por los 2 márgenes del río de l'Alcora, con inicio y final en la Real Fábrica, y con enlaces, además, con los PR locales y con rutas de términos vecinos, como la Ruta Natural del agua de Figueroles, que a la vez enlaza con el Camino Natural Ruta de los Molinos de Agua de Lucena, generando así un itinerario de cerca de 30 km de longitud a lo largo del río, donde se integran muchos elementos del patrimonio industrial, natural y etnológico de interés turístico.