El presidente de la Diputación, José Martí, ha visitado hoy el cementerio de Castelló con motivo de la nueva campaña de exhumaciones que se está realizando, junto a la diputada de Memoria Histórica, Tania Baños, la diputada provincial y alcaldesa de Benicarló, Xaro Miralles, y la concejala de Memoria Democrática del Ayuntamiento de Castellón, Verónica Ruiz. Se trata de una actuación que se financia con cargo a la subvención de 66.000 euros que la Diputación ha aprobado este año para el Grup per la Recerca de la Memòria Històrica de Castelló, en colaboración con el Ayuntamiento, que es el propietario de la instalación, y la Generalitat Valenciana. En esta partida se incluyen trabajos para intentar localizar en el término de Nules a cuatro personas originarias de Moncofa. Las instituciones trabajan con el objetivo de recuperar todos los cuerpos de personas fusiladas en el cementerio de Castelló durante el franquismo en la presente legislatura e iniciar la fase de identificación a través de las pruebas de ADN.
El hijo de un fusilado de Benicarló
Durante la visita, el presidente ha tenido la ocasión de departir con el hijo de una las personas enterradas en la fila sobre la que se está actuando en la campaña de 2021. Es un vecino de Benicarló que tenía 6 años cuando su padre fue fusilado a la edad de 33 años. «Historias como ésta dan sentido a la partida presupuestaria incluida en los presupuestos de la Diputación de los dos últimos años, porque es un derecho humano que las personas puedan descansar en paz y junto a los suyos». Son palabras de José Martí, quien ha señalado que «toda esta tarea tiene el objetivo de que se aprenda que lo que en momento de nuestra historia ocurrió, no puede volver a repetirse nunca». En su opinión, resulta vital «el apoyo de las instituciones y el consenso social, 'la amistad cívica' que va más allá de la normal discrepancia, y que tiene que unirnos a todos bajo una legitimidad y un estado de derecho».
Concluir los trabajos en este mandato
En similares términos se ha pronunciado la diputada de Memoria Histórica, Tania Baños, quien ha recordado que cuando en 2019 echó a andar la Diputación del cambio optó por colaborar con el Grup per la Recerca de la Memòria Històrica de Castelló y el Ayuntamiento de Castellón «para recuperar la memoria de una de las épocas más oscuras de nuestra historia y contarla para que aquello no vuelva ocurrir, fortaleciendo las instituciones y la democracia, mejorándola, para que nadie sea asesinado nunca más por el mero hecho de tener una ideología y pensar de forma crítica».Baños espera que finalicen las exhumaciones antes de que concluya el actual mandato para iniciar los procesos de identificación, «que no está resultando nada fácil» y poder retornar los cuerpos a sus familias, algo que será posible gracias al trabajo previo del Grup de la Recerca de la Memòria Històrica.La diputada también ha informado de que la próxima semana se realizará una reunión de coordinación para planificar las actuaciones a desarrollar en 2022, «con la intención de dejar resuelto este asunto antes de que se convoquen las próximas elecciones».
Dignidad y justicia
Por su parte, la concejala de Memoria Democrática al Ayuntamiento de Castelló, Verònica Ruiz, ha destacado el compromiso conjunto entre la Diputación y el Ayuntamiento para «dar dignidad y justicia a todas las personas que les arrancaron la vida de una forma miserable por una cuestión ideológica y para ser demócratas». Para la edil «entregar los restos de los cuerpos a sus familiares es un acto de reparación democrática y para que puedan darle un entierro digno».