Los avisos de lluvias y tormentas que la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) activó el miércoles, se vio reflejado en lluvias y tormentas que han ayudado a los efectivos que trabajan en los distintos incendios forestales que se han producido durante esta semana en la Comunitat Valenciana.
Aunque tardó en aparecer, la lluvia llegó al entorno de Bejís y ayudó a que las llamas del incendio forestal se redujeran y a frenar el avance del fuego imparable consumiendo la masa forestal de la comarca del Alt Palància. Durante esta noche se han podido registrar entre 14 y 20 litros de lluvia por metro cuadrado en la zona, lo que sumado a una mayor humedad en el ambiente, han ayudado a contener el incendio, que ya ha superado las 13.100 hectáreas calcinadas. Sin embargo, desde las autoridades que trabajan en la extinción del fuego, advierten que todavía no está controlado y que todavía quedan zonas muy calientes. Además, según las autoridades que trabajan en el incendio, las llamas se han reavivado por el viento que sopla desde el interior de la provincia esta mañana.
Según el president de la Generalitat, Ximo Puig, el día de hoy va a ser “un día decisivo” para la evolución de los distintos incendios que arrasan la Comunitat Valenciana debido a la bajada de temperaturas, la humedad y la lluvia. A pesar de ello, se mantiene el nivel de preemergencia extremo por riesgo de incendios forestales en toda la Comunitat Valenciana, por lo que está totalmente prohibido hacer cualquier tipo de fuego.
Equipos trabajando en el incendio
Emergències 112CV ha informado que durante esta noche se han producido ligeras rachas de viento de poca intensidad, y que los efectivos que trabajan en la extinción del incendio han podido realizar un ataque al frente de las llamas mediante el ajuste del perímetro. En esto han trabajado tres dotaciones de Bomberos de la Diputació de Castelló, una dotación del Consorcio Provincial de Bomberos de València, una dotación del departamento de Bomberos del Ayuntamiento de València, cinco unidades de Bomberos Forestales de la Generalitat y un equipo de Bomberos Forestales de Castilla-La Mancha.
A primera hora del día se ha procedido a identificar las zonas de trabajo con la finalidad de distribuir los medios aéreos. Un total de 34 medios aéreos están trabajando para la extinción del fuego, de los cuales 9 son de la Generalitat Valenciana, 18 del Gobierno de España, 3 de Castilla-La Mancha, 3 de Cataluña y 1 de Aragón.
Carreteras y poblaciones afectadas
El incendio de Bejís ha provocado que se corte el tráfico en un total de tres carreteras, todas ellas en las inmediaciones de Bejís y Teresa. Según ha informado este jueves la Conselleria de Política Territorial, en Castellón están cortadas la CV-235 entre Teresa y Bejís, la CV-236 desde el enlace de la CV-235 hasta Bejís, y el acceso a la CV-235.
Cabe recordar que las localidades de Bejís, Torás, Teresa, Sacañet y el camping de Viver han sido desalojadas, y se le ha pedido a la población de esta última confinarse en sus casas por el riesgo del humo. Además, el incendio llegó ayer a la provincia de València, afectando a masa forestal del término de Alcublas, en la comarca de Los Serranos.
Más de una decena de heridos
Los trabajos de extinción del incendio se están viendo comprometidos debido a las condiciones meteorológicas así como a la dificultad de la orografía del terreno. Tanto es así, que dos bomberos han tenido que ser trasladados a centros hospitalarios por quemaduras; así como la madrugada del miércoles ha resultado herido un agente de protección de la naturaleza del equipo de bomberos de Aragón.
Además, el martes 16 de agosto por la tarde, un tren que cubría el trayecto Valencia-Zaragoza, tuvo que detenerse entre Masadas Blancas y Barracas, para regresar a Caudiel ante la gran proximidad de las llamas del incendio de Bejís. Algunos de los pasajeros entraron en pánico al ver las llamas tan cercanas al tren, por lo que decidieron salir de los vagones.
En total, unas 15 personas aproximadamente sufrieron quemaduras, de los cuales tres tuvieron un pronóstico grave y seis tuvieron que ser ingresadas. Todas las personas heridas fueron evacuadas y fueron atendidas en los hospitales más cercanos, mientras que una de las personas graves tuvo que ser intubada y trasladada en helicóptero hasta La Fe de València debido a la gravedad de sus quemaduras.